Nuestras letras nos delatan, y la forma en la que escribimos deja notar nuestro sentir.
Si no has practicado esto, te invito a que lo practiques. A muchas personas les gusta escribir, yo soy una de ellas. Otras tantas dicen "no es lo mío". Pero realmente la invitación a escribir es para que te puedas observar a través de tus letras.
Si, nuestras letras reflejan nuestro interior, difícilmente se puede mentir a través de ellas, al menos no a uno mismo.
Observación.
Esta palabra ha llegado a mi mente en los últimos días, como si fuera un aviso de lo que tuviera que trabajar en mi persona.
La he visto en varias ocasiones durante la semana, ya sea en videos, frases, libros, y temas de los que estudio.
OBSERVAR...
Pero la intención de esta palabra ha sido más bien en sentido introspectivo. El llamado ha sido a OBSERVAR mis pensamientos.
¿Pero cómo se puede observar uno mismo?
A través de sus letras.
No es fácil observar un pensamiento, a menos que escribas lo que piensas. Cuando tú decides escribir lo que realmente piensas y sientes, sin filtros, entonces eres capaz de observarte.
Para empezar no es fácil aceptar lo que uno siente. Es más fácil decir lo que se piensa de los demás, pero no se ve uno mismo.
Observarse uno mismo requiere VALOR. Por eso mismo normalmente comento, que todo trabajo interno es de valientes. No cualquiera se atreve a verse a uno mismo sin filtros. Es la única forma de poder hacer cambios, cuando nos enfrentamos a lo que no nos gusta, cuando nos enfrentamos a nuestras propias sombras.
Casualmente, (que ya sé que nada es casualidad) me invitaron a dar un curso a una empresa, donde me pedían compartir parte de las herramientas que aplico en mi vida, pero enfocada a logro de objetivos empresariales. Di el curso, y quienes me conocen, saben que todo esto me encanta. Así que hice uso de esta herramienta.
Vaya... sucedió como magia. Los asistentes quedaron impactados al ser capaces de OBSERVARSE a sí mismos a través de sus letras, y poder verse desde otra perspectiva, desde otro panorama. Dejando de culpar a los demás y haciéndose consciente de una responsabilidad compartida.
Nada es casualidad... y hoy quise compartir contigo esta palabra.
Que seas capaz de OBSERVAR tus pensamientos, palabras y acciones, pues estos son los que crean tu realidad.
Es como escribir un libreto para una película, una vez que se escribe en tu pensamiento, imagina que el universo los toma y dice "LUCES, CÁMARA, ACCIÓN" y la película empieza a correr, y esa, es la realidad que ves.
¿Quieres cambiar tu realidad?
Cambia el libreto que escribes diariamente con tus pensamientos, palabras y acciones., pues estos ellos te llevaran al lugar donde estas.
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